Por qué el fútbol americano no es deporte olímpico
El fútbol americano es uno de los deportes más vistos en Estados Unidos, con la NFL como su máxima expresión. Sin embargo, nunca ha sido parte del programa de los Juegos Olímpicos. La pregunta surge sola: ¿por qué un espectáculo tan popular no está en la cita deportiva más grande del mundo?
La respuesta combina varios factores: la poca expansión internacional del fútbol americano tradicional, la gran cantidad de jugadores necesarios, los riesgos físicos del deporte y la dificultad de adaptarlo al calendario olímpico. Estas razones han hecho que, durante décadas, el Comité Olímpico Internacional (COI) lo deje fuera.
Pero esa historia cambiará en Los Ángeles 2028, con la inclusión de una variante más ligera y global: el flag football.
Qué es el flag football, la variante olímpica del fútbol americano
El flag football es una modalidad sin contacto del fútbol americano. En lugar de placajes, los jugadores deben quitar una cinta (flag) que cuelga de la cintura del rival para detener la jugada. Esto lo convierte en un deporte más dinámico, seguro y fácil de practicar en distintos países.
A diferencia de la versión tradicional, el flag necesita menos jugadores, menos equipamiento y puede disputarse en canchas reducidas. Gracias a estas características, ya cuenta con federaciones en más de 100 países, lo que facilitó su aprobación para Los Ángeles 2028.
Su inclusión no solo amplía la oferta olímpica, sino que también busca atraer a nuevas generaciones, con un formato más accesible y atractivo para el público juvenil.

Por qué la NFL impulsa el fútbol americano olímpico
La NFL ha apoyado fuertemente la expansión del flag football, entendiendo que los Juegos Olímpicos representan la plataforma ideal para globalizar su deporte. Con su inclusión en Los Ángeles 2028, el fútbol americano tendrá por primera vez presencia en la cita olímpica, aunque en versión adaptada.
Para la liga, es una estrategia de crecimiento: acercar el deporte a países donde la NFL aún no tiene un gran mercado y fomentar la participación juvenil. Al mismo tiempo, permite que el fútbol americano sea visto bajo una nueva perspectiva, sin la dureza de los contactos y con un énfasis mayor en la velocidad y la agilidad.
El futuro del fútbol americano en los Juegos Olímpicos
El debut del flag football en Los Ángeles 2028 marcará un hito. Aunque el fútbol americano tradicional difícilmente se adapte al programa olímpico, su variante sin contacto ya abre una puerta a la internacionalización.
Será la primera vez que el deporte tenga presencia olímpica, mostrando al mundo que más allá de la espectacularidad de la NFL, existe una forma inclusiva, segura y con crecimiento global.
En 2028, el fútbol americano olímpico dejará atrás los choques de cascos para dar paso a un espectáculo diferente: la velocidad, la estrategia y las cintas arrancadas en el campo de juego.