El Roland Garros de Estados Unidos: cuando el US Open se jugó en arcilla de color verde
El US Open es hoy sinónimo de cemento, luces neoyorquinas y partidos que se juegan hasta altas horas de la madrugada en el Arthur Ashe Stadium. Sin embargo, durante un período poco recordado, el torneo más importante de Estados Unidos se disputó sobre arcilla. Y no cualquier arcilla: era verde, una superficie conocida como Har-Tru, muy distinta a la roja tradicional de Roland Garros.
La decisión de cambiar el césped por la arcilla verde se tomó en 1975. El torneo, que históricamente se había jugado en canchas de pasto como Wimbledon, buscaba modernizarse y reducir las quejas por la irregularidad del césped de Forest Hills, sede del Abierto en ese entonces. Así, entre 1975 y 1977, el US Open se transformó en un torneo de arcilla, lo que modificó radicalmente su dinámica de juego y el perfil de sus campeones.
Tres ediciones históricas sobre Har-Tru
La primera edición en arcilla verde, en 1975, coronó al español Manuel Orantes, que dio la gran sorpresa al vencer en la final a Jimmy Connors por 6-4, 6-3, 6-3. Fue una de las pocas veces en la historia en que un jugador europeo de escuela de polvo de ladrillo se impuso en Nueva York.
En 1976 y 1977, sin embargo, Connors se adaptó y se quedó con el título, demostrando su versatilidad. En damas, las tres campeonas de esa etapa fueron las estadounidenses Chris Evert (1975, 1976) y la australiana Virginia Wade (1977).
El experimento duró poco. En 1978, el torneo se mudó definitivamente a Flushing Meadows y adoptó las canchas de superficie dura de cemento (DecoTurf), que hasta hoy son su sello distintivo.
El legado de un experimento único
La etapa de arcilla verde fue breve, pero marcó un momento de transición para el US Open. Permitió que jugadores especialistas en superficies lentas tuvieran su oportunidad en Nueva York y dejó resultados inesperados en una época dominada por figuras como Connors y Björn Borg.
Además, quedó en la historia como la única vez que un Grand Slam cambió de césped a arcilla y luego a cemento en apenas cuatro años. Un caso excepcional en el tenis profesional.
