Buzkashi, el violento deporte que se juega con una cabra decapitada y es furor en Afganistán

Buzkashi, el violento deporte que se juega con una cabra decapitada y es furor en Afganistán
Buzkashi es el deporte nacional en Afganistán (As)

El buzkashi es el deporte nacional de Afganistán y uno de los juegos más antiguos de Asia Central. Su nombre, que en persa significa «agarrar la cabra», refleja la esencia de la competencia: dos equipos de jinetes compiten por hacerse con el control de una cabra decapitada, que sirve como una especie de balón, y llevarla hasta una meta.

Sin embargo, no hay un árbitro que supervise la contienda, lo que contribuye al caos y la emoción que caracteriza a este juego centenario. Aunque popular en Afganistán, el buzkashi también se practica en otros países como Tayikistán, Uzbekistán y partes de Pakistán.

El juego está profundamente enraizado en la historia y cultura de la región, habiendo nacido entre las tribus nómadas, quienes utilizaban caballos tanto para el transporte como para la guerra. A lo largo del tiempo, esta actividad se transformó en una demostración de destreza ecuestre y valentía.

Cómo se juega al Buzkashi

En una partida de buzkashi, los jugadores, conocidos como chapandazan, montan a caballo y tratan de agarrar la carcasa de una cabra decapitada y sin patas (o, en algunas versiones, un becerro) que se coloca en el centro del campo. El objetivo es arrebatarla a los otros jinetes y depositarla en una zona designada llamada «círculo de la justicia» o «meta».

Las reglas no están estrictamente codificadas y varían de una región a otra, lo que añade un elemento de imprevisibilidad al juego. Aunque no hay árbitros que regulen la partida, se espera que los jinetes respeten un código de honor no escrito. Las partidas pueden durar horas, e incluso días, hasta que un equipo logre los puntos suficientes.

El buzkashi es una prueba de fuerza física, resistencia y habilidades de equitación. Los caballos, criados especialmente para este deporte, son una parte clave del equipo y se someten a un entrenamiento riguroso que puede durar años.

Buzkashi, prohibido por los talibanes en los ’90

El buzkashi fue prohibido por el régimen talibán cuando tomó el control de Afganistán en la década de 1990. Los talibanes consideraban el deporte inmoral y contrario a los valores islámicos, alegando que fomentaba la violencia y el desorden. Durante su régimen, que duró hasta 2001, los talibanes prohibieron no solo el buzkashi, sino también otras formas de entretenimiento populares, como el cine, la música y muchos deportes.

Tras la caída del régimen talibán en 2001, el buzkashi resurgió rápidamente como un símbolo de la identidad cultural afgana. Los torneos volvieron a celebrarse en Kabul y otras ciudades, atrayendo a multitudes y contando con el apoyo del gobierno y de figuras públicas. En la actualidad, aunque los talibanes han vuelto al poder, el buzkashi sigue siendo una actividad practicada en varias zonas del país, aunque bajo una vigilancia más estricta.

Deportes similares al Buzkashi

El buzkashi tiene similitudes con otros deportes de Asia Central que también combinan la equitación y la competencia física. Uno de ellos es el kokpar, practicado en Kazajistán y Kirguistán, donde los jinetes también luchan por el control de un cadáver de cabra, con algunas variaciones en las reglas y en el formato de los torneos.

Otro deporte comparable es el polo, que también involucra jinetes, aunque con un enfoque más organizado y con un uso de una pelota en lugar de un animal. Históricamente, el polo se originó en Persia y se extendió por Asia Central, influyendo en la creación de deportes como el buzkashi.

Sin embargo, a diferencia de estos deportes, el buzkashi conserva un espíritu más caótico y salvaje, reflejo de su origen tribal y guerrero. Su falta de reglas estrictas y la ausencia de árbitros lo distinguen como una actividad donde la habilidad personal y la resistencia son las claves del éxito.

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